martes, 6 de julio de 2010

LO QUE NUNCA SE SABE



Hay veces en la vida que no nos entendemos con palabras, que sería necesario que los ojos estuvieran cerca de los ojos, las manos tal vez pudieran tocarse con la fraternidad de un amigo y seguramente todo aún lo inentendible estaría todo dicho, sin dar explicaciones que por escrito no tienen ni siquiera la cadencia de la voz.
Lo vivido y lo imaginado tienen límites muy finitos. Ante esa frontera sólo pongo el amor y la gratitud y sólo quiero que quién lo merezca tenga lo mejor que pueda tener en el mundo.
Esas cosas que nunca se saben suelen saberse con un abrazo. A veces no es posible darse ese abrazo.
Una vez usé la frase de Mario Benedetti, no es una lástima, es una tristeza.

Y estoy triste.

Mercedes Sáenz

3 comentarios:

josé lopez romero dijo...

Tu escrito Merci me hizo pensar en la distancia lejana que puede tener estar cerca de alguien con quien no "conectamos", a eso lo remedia un abrazo, tal lo dices, no lo dudo. Somos esa frontera, somos una muralla, un foso infranqueable cuando no sabemos demoler esa barrera que lastima nos echa de la vida. Es cierta esa tristeza.

mercedes saenz dijo...

Muchas gracias querido amigo José. Un abrazo.
Merc i

Isabella Ros dijo...

MERCE,es tan real la distancia,como la tristeza que tantas veces nos oprime,estar cerca...pero tan lejos...necesitar ese abrazo que son solo letras,pero hay un corazón que no tiene límites,el mío,vuela hacia tí lleno de luz,con un rayito de
alegría...nunca se sabe...
ENORME ABRAZO.