martes, 17 de junio de 2008

UN ABRAZO

UN ABRAZO




Una sola línea había dejado aquí, pues considero que el abrazo es el símbolo más perfecto de la expresión del hombre y la mujer, tengan la edad que tengan y sea cual fuere la causa que se los provoca. Padres e hijos, amigos, amantes, extraños que se ven por vez primera. Pueden ser cómplices, consuelo, consolidar un trato, formales, distraídos. Pueden ser únicos y no volver a repetirse. Tengo en la memoria de mis afectos tal vez la colección más grande de abrazos que yo conozca. Y de muy pocos de ellos me arrepiento. Lo considero siempre algo de a dos y es una de las peores sensaciones que quedan en el cuerpo y en al alma, saber que palabras vacías pueden ser más contundentes que un abrazo que fue dado con el corazón. De manera que de la misma forma que he borrado otras cosas de mi vida, borro aquellos que no han sido ciertos. Acá quiero dejar abierto hasta que vuelva el abrazo que doy y que recibo solamente de la gente sincera. Los conozca o no. El que dejo es sincero, cómo futuro diálogo de la buena fe, no de aquellos que por confusión entrelazan palabras que no dicen nada, que por no compartir las mismas opiniones con respecto a determinados temas es cómo si se hubiera cometido un asesinato del alma. Y entonces uno se pregunta ¿a quién abracé alguna vez? ¿Quién era?
Mi abrazo desde acá es imaginario, puedo darme el lujo de dártelo limpiamente, envuelto en algo transparente cómo el alma y entonces tal vez algún día escribiéndonos sinceramente podamos saber que en el medio de las letras nos hemos abrazado sagradamente. Ahora sí, feliz, te mando un abrazo.
Mercedes Sáenz

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Un abrazo inmenso Merci. EStamos disfrutando tu libro FIlos de Lata mucho, leyendo relato a relato por las noches como a un posaalmas (no como un posavasos)GRACIAS,
abrazos nuestros, Lauris.

Anónimo dijo...

Este abrazo -del que hablo ahora yo- no es ni de letras, ni simbólico. Es una mera demostración del cariño que vos, Willy, Fede y Juan y Luquitas, me regalaron de forma desinteresada.
Y que hoy día, yo retribuyo expresándoles mi afecto.
Con cariño va este fuerte abrazo!

Laura (Junior)