martes, 5 de febrero de 2008

8 VOS 9 NOS

Era la época de un presidente riojano. Algún cono de la provincia. El asfalto rodea el lugar, como un río bordeando la villa. Villa brava. Cómo si no fuera brava cualquiera. Para el que no está adentro el corazón se destroza, la conciencia estalla. Y por ese río, autos de todos los tamaños que buscan las autopistas. Frontera de choripán y chicos descalzos, en el invierno. Una curva me puso un cartel de frente. Alto, blanco, sobre una colina, final de otro lado urbano que se llama “Las Lomas de San Isidro”. Escudos y sellos hasta llegar a su texto. Grande, en letras negras, abarcando en sus colores dos extremos. “8 VOS 9 NOS”, con mayúsculas.
Salté del asiento de ese cofre que nos lleva guardados en cuatro ruedas para algún lugar de la autopista.
- ¿Ves?- señalé ¡Están educando!
- ¿Educando? Voz de generaciones posteriores y del asiento de atrás.
- ¿No ves?- Señalo nuevamente eufórica el cartel- Es brillante, brillante!. Ocho es lo que piden a los que vienen y el Estado pone un nueve. Es bueno no salir con diez. Es importante tener siempre espacio para mejorar con decisión propia y libertad.
- Vieja, ahí dice octavos y novenos. Escuela General Básica. Están educando, pero no como vos pensás.
Casi me trago mis palabras. Ceguera de parte de mi. Presbicia de pensamientos, también.

MERCEDES SAENZ

1 comentario:

Unknown dijo...

Merci:
es grande reconocer la propia "miopía" frente a algunas circunstancias.
Pero más grande es el que se anima a hacer de esa experiencia un universo literario.
Felicitaciones, y gracias también, por poner tus sentimientos, tus experiencias y tu corazón al alcance de todos nosotros.
Nicolás y Matilde