sábado, 30 de agosto de 2008

ESQUINA EQUIVOCADA

ESQUINA EQUIVOCADA




Una extensión de mí, primitiva y primaria quedó en esa esquina. El viento pica en remolinos igual que tu sombra danzando en cuchillos. Aún la sangre sigue y gira en un laberinto ciego de memoria por dentro. Era esta la esquina antes que se abrieran los ojos de ver el olvido despeñarse en piedras, de caminar al revés de todo el mundo, mucho antes de abrazarte afuera dónde te dije que a la intemperie no existe acurrucarse. Antes de anunciarte en las noches móviles dónde tu palabra era un secreto, música sabia y abrazo a cualquier hora.
La esquina insiste con su luz rabiosa y perisitente pero tu voz la desconozco porque está en ninguna parte. Y camino con esa manía de no saber cuidar el paso breve tratando de reconocer alguna otra alcantarilla. Y un tango me ata a un farol con una música tan suave que quisiera convertirme en rehen excusa para quedarme un rato.
Pero es inocente la hora en que pienso que voy a encontrarte. Pero esta esquina no es y es muy tarde para quedarme hablando sola.
Tal vez un día oigas mi voz y no reconozca la tuya. Pensaré mientras con el mismo amor que te cuides antes de llegar al fin del mundo.


Mercedes Sáenz

3 comentarios:

Anónimo dijo...

No creo que sean cómo dijiste una vez, hace ya muchos, muchos renglones abajos, "medios poemas acosados". Prosa apaisada tal vez. Prosa solamente. Texto solamente. Poco me importa que definción tengas para tus escritos. Empecemos por el sentido, por la forma de hacer puente la palabra con el otro. Por utulizar una vuelta cómo de música para decir algo que podría ser de otra manera. Por la belleza, por la sensibilidad, por esa única forma de escribir que no he visto ni leído en nadie. Trasciende más allá de lo que tu piensas. Respiran de una manera diferente y te hacen pensar historias, mover las células y los sentidos. Me tomé este tiempo para escribirte porque hace unos días que vengo leyendo textos tuyos y estoy realmente sorprendido. No te conozco Mercedes y tal vez nunca pueda hacerlo porque estamos muy lejos. Alguien me prestó tu libro. Hay allí un mail. Te scribiré por esas línes si es que me lo permites. pero la felicitación debía quedar aquí. Un saludo cordial. Martín Panese

Anónimo dijo...

Mercedes:
Tu particular forma de hacernos vivir y sentir , me encanta tus escritos dia a dia nos enbellesen el alma .
un beso.
andres rodriguez alias chocolate

Recomenzar dijo...

Hola Mercedes.Tus escritos tienen tu alma de poeta, me asombran y fascinan, y no me canso de leerte y releerte

Besos desde mi recomendar en una noche de martes llena de lluvia