jueves, 6 de marzo de 2008

REZOS PARA MI EN ESTOS DIAS


REZOS PARA MÍ EN ESTOS DÍAS



Esta noche debo de hacer un trato conmigo. La vida se me está presentando cómo una góndola de misterios y debo elegir. Temblaré ante mi nombre si ya sé que no soy la luna. No se que sacaré de la superficie de este mundo asustada por las voces que parecen escaleras redondas que vuelven al mismo sitio después de hacerme subir y bajar como montaña rusa. Un frío se junta en el cuerpo, el mío, como los espacios que quedan en las piedras a la sombra.
Están deliberando a mis espaldas unos apóstoles de la sabiduría, se amontonan los que me dejaron creer que eran genios y algunos políticos en mentirosa conferencia. Deliberan y encuentro gestos de moluscos y un ojo que perdió algún inteligente. Los sonidos de las voces que recuerdo son ahora como los silbidos que pasan por las banderolas, en esos rincones dónde se junta la tierra y no llegan los dedos.
Cuánto de mi sordera habrá quedado por ahí y que tanto de mi ceguera cuándo ya no se juega más al gallito ciego.
Deliberan todas las voces y no sé que van a hacer conmigo porque cuándo de mi se trata soy pagana. Y las voces no callan el azúcar de algún amor memorioso.
Borrar un mordisco en una manzana se borra con otro mordisco nuevo y no se morder. Y me paro desafiante en el medio de la tierra, sin gritar.
Acaban de hacer un trato conmigo y parece que no me voy a enterar. Tal vez las voces debo bajarlas de la luna.
Mercedes Sáenz

3 comentarios:

mercedes saenz dijo...

Los pido porque creo que pronto va a ver un libro por ahi y todo me parece un espanto y estoy con bastante miedo. Acepto cualquier rezo que sea con buena intención, dirigido al ser supremo en el que crean. Yo creo en un sólo Dios que estoy segura que aunque tenga otro nombre y otra forma es el mismo que el tuyo, si en un mínimo pedazo de amparo piensa cómo el mío. El mío, que es un nuestro es buenísimo. Se lo siente.

Anónimo dijo...

Alguien reza por vos Merci, aún los ciegos.

Anónimo dijo...

Alguien reza por vos Merci, aún los ciegos.